LA TURQUESA
Propiedades y características
Pertenece al grupo de los fosfatos, formados por la unión de fosforo, oxígeno y cationes.
La turquesa lleva también agua y aniones extraños, es un fosfato de aluminio y cobre hidratado. Es al cobre a quien debe su color la turquesa, que puede variar del celeste claro al azul verdoso, dependiendo de la mina origen.
Es una piedra muy porosa, y su color se puede ver alterado si pierde el agua que contiene, volviéndose verdosa.
Su dureza oscila entre 5 y 6 en la escala de Mohs, pero es un material frágil y debe manejarse con cuidado.
Su origen geológico es sedimentario. Hay turquesas que presentan restos de la roca madre en forma de venillas negras o marrones que se denominan turquesas matrix.
Las turquesas son de origen sedimentario y por tanto pueden estar relacionadas con otros yacimientos por ejemplo en minas de cobre. Hay yacimientos en Egipto, Irán, EEUU y España.
Imitaciones y síntesis de la turquesa
La turquesa es una piedra que se trata con distintas impregnaciones para mejorar su color y aspecto.
Además es una de las piedras más imitadas haciéndose turquesas sintéticas (turquesa Gilson) e imitaciones con distintos materiales, como la porcelana, el vidrio, plástico, hueso teñido, calcedonias teñidas, howlita teñida, la turquesita en China es muy blanquecina y se tiñe para darle el aspecto brillante de la turquesa, etc.
Curiosidades de las turquesas
La turquesa es una gema muy porosa, por lo que requiere de ciertos cuidados. Hoy en día casi todas las turquesas vienen recubiertas para protegerlas. Cuando las turquesas pierden su brillo lo vuelven a recuperar mediante un pulido, este debe realizarlo un lapidario. No se debe usar detergentes, ni jabones ni ningún producto corrosivo con las turquesas.
Los yacimientos de turquesa se encuentran generalmente en zonas desérticas y alejadas, en el Sinaí (Egipto) desde al menos la primera dinastía de faraones sobre el 3000 a.C las turquesas se usaron en infinidad de amuletos y joyas, en la antigua Persia (hoy Irán) hace más de 2000 años se ha posicionado como una de las fuentes de abastecimiento de turquesas más importante, en EEUU en los estados de Arizona, California, Colorado, Nuevo México y Nevada se encuentran los yacimientos más significativos de este mineral, estas minas ya eran explotadas por los nativos antes del descubrimiento de América, hasta 1920 el estado era el mayor productor del país, pero hoy en día su operatividad es casi nula, solo el yacimiento Apache Canyon en California funciona con capacidad comercial.
La palabra turquesa deriva del francés “Pierre Turquoise” o “piedra turca”, sin embargo en Turquía nunca hubo yacimientos de turquesas, pero estos fueron los que la introdujeron en Europa con lo que probablemente a esto se debe la confusión. Los persas la llamaban “kallalith” o piedra hermosa o también “fayruz” gema de la buena suerte.
Según la tradición hebrea la primera mina de turquesas la explotó Isaac, hijo de Abraham, en el monte Sinaí, siendo estas gemas muy codiciadas tanto por los antiguos hebreos como por los egipcios.
En el antiguo México, los mayas y los aztecas consideraban a la turquesa una gema sagrada, con lo que solo podía utilizarse para vestir a los dioses.
En Grecia los hombres usaban la turquesa como protección contra los asesinatos y los envenenamientos mientras que en Roma eran las mujeres quienes la usaban, muchas veces molida para adornar el cabello.
En la Edad Media se le atribuyó el símbolo del valor y la grandeza con lo que se convirtió en el talismán de la Sagrada Orden de los Caballeros de Oriente.
Aspectos psicológicos del color
La turquesa de color azul cuando se oxida pasa a un tono verdoso.
Aspectos mitológicos de la turquesa
Es una piedra “sagrada” para muchas de las tribus indias de América. Nativos de los Estados Unidos y de México la usaban para proteger a sus difuntos.
En el antiguo Egipto era la piedra que la diosa Hator, había regalado a la humanidad.
Para árabes y turcos también era un talismán.
A día de hoy, en la India, aun se adornan los elefantes en la India con esta piedra para protegerlos.
La turquesa estimula la belleza interior y exterior, atrae nuevas amistades y hace de la persona que la lleva un ser más alegre, espiritual y sereno, pues aporta equilibrio emocional. Muy recomendable para personas ansiosas o estresadas.
Signos del zodiaco afines: Libra, Acuario.
Abre especialmente el chakra de la garganta.
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